El ajedrez es un deporte de tablero. Su enorme complejidad hace de él un juego extremadamente complicado. Sin embargo, no tengas miedo a aprenderlo y jugarlo. Es uno de los juegos que más recompensas emocionales proporciona. Este curso es una introducción al ajedrez y si te parece de utilidad compártelo. No tiene coste.
En esta primera lección vamos a hablar un poco de cómo surge este juego.
El primer predecesor del juego probablemente se originó en la India, en el siglo VII d.C.. Desde la India, el juego se extendió a Persia. Cuando los árabes conquistaron Persia, el ajedrez fue adoptado por el mundo musulmán y posteriormente se extendió al sur de Europa. En Europa, el ajedrez evolucionó aproximadamente a su forma actual en el siglo XV.
Un antepasado fue el chaturanga, un popular juego de guerra para cuatro jugadores que ya mostraba varios aspectos clave del ajedrez moderno. Una forma de chaturanga viajó a Persia, donde el nombre de la pieza “rey” cambió del sánscrito rajá al persa shah.
En el juego hay dos bandos, dos contrincantes. Tu objetivo es hacer jaque mate a tu rival, ganando de ese modo la partida o hacer que se rinda.
Cualquier lugar es bueno para jugar al ajedrez. A veces una mesa en un parque en la cual está dibujado un tablero permiten a dos personas jugar. No hay idiomas, no hay géneros, no hay política. Únicamente eres tu intentando ganar a tu rival. Es tu cerebro jugando contra otro cerebro.
Los posibles resultados de una partida son: