El sentimiento expresado en la ley de Murphy “Todo lo que pueda ir mal, irá mal” ha probablemente existido desde que hace miles de años. A partir del momento en que las cosas empezaron a ir mal a los hombres racionales. En 1786, por ejemplo, el poeta escocés Robert Burns escribió, “los planes mejor preparados en ratas y en hombres a menudo se desvían [son propensos a ir mal] (“The best laid schemes o’ mice an men gang aft a-gley.“). Pero la oficial Ley de Murphy es mucho más reciente. De hecho tiene apenas unos 70 años de edad. ¿Como empezó todo?.
El experimento
En 1949, la fuerza aérea de Estados Unidos llevaba a cabo una serie de pruebas para comprobar el efecto de rápida deceleración en los pilotos. Así ellos podrían saber mejor como la mayor fuerza afectaba al cuerpo de los pilotos en un accidente de avión. Las pruebas, las cuales fueron conocidas como Projecto MX981. Consistieron en lanzar voluntarios en un cohete propulsado sobre unos raíles, acelerando y luego frenando de golpe bruscamente. Los voluntarios llevaban puestos unos arneses especiales con 16 sensores que medían la aceleración, o las fuerzas G, en diferentes partes de sus cuerpos.
El arnés era invención de un capitán de la Fuerza Aérea llamado Edward A. Murphy … pero los 16 sensores individuales fueron instalados por otra persona. En el día de la profética prueba un voluntario, John Paul Stapp, fue atado con correa al trineo y se cohetes se encendieron. La prueba fue como estaba previsto. Aceleró el trineo aceleró a una alta velocidad y luego bruscamente frenó en seco, provocando una enorme fuerza sobre su cuerpo. El voluntario abandonó el trineo con sus ojos sangrando asi como su nariz. Stapp había sufrido en su cuerpo una fuerza de deceleración de unos 40G, o 40 veces la fuerza de la gravedad. Pero nadie nunca sabrá eso seguro. Todos los 16 sensores fallaron, dando cada uno una lectura incorrecta en la prueba.
Cuando Murphy examinó el arnés para ver que había pasado. Descubrió que el técnico que había instalado los sensores los había colocado al revés. Debido a un error humano la vida de Stapp se había puesto en peligro.
La frase
Hay varias versiones de lo que dijo Murphy a continuación. Podía haber maldecido al técnico responsable de su error. Podía haber dicho “Si hay un camino para hacer algo mal, se hará mal”. Lo que dijo originariamente, en una rueda de prensa días después del incidente fue: “si hay dos o más caminos de hacer algo y uno de ellos conduce a una catástrofe, luego alguien hará ese camino“. Meses después, esta expresión se convirtió en conocida por la industria aeroespacial como la “Ley de Murphy“.
Fuente: [www.neatorama.com]